En el último informe "Evaluación Actualizada de los Campos Electromagnéticos en relación con la Salud Pública", realizado por el Comité de Expertos de Sanidad y de fecha 1 de septiembre, se reitera que la acual normativa garantiza que los posibles efectos nocivos de estos sistemas de comunicación no perjudican a los ciudadanos.

"La evidencia experimental publicada hasta el presente sobre la posible influencia de los campos electromagnéticos en las diversas etapas del proceso carcinogénico no es concluyente", dice el informe de Sanidad al que tuvo acceso Servimedia.

El estudio añade además que tampoco provocan cancer en los niños, si bien cita que algunos estudios epidemiológicos "indican un posible igero incremento del riesgo de leucemia en los niños", pero puntualiza que la asociación entre esta enfermedad en los niños y los campos electromagnéticos "no es suficiente para concluir" esta relación.

Respecto a la incidencia de las antenas de telefonía móvil, el estudio "no aconseja el alejamiento" de los núcleos urbanos porque "implicaría necesariamente un incremento significativo de la potencia de emisión de las antenas y de los teléfonos para tener cobertura".

El último informe de los experos de Sanidad sí incide en el efecto sobre la salud de las líneas de alta tensión y pide que se regule la instalación de nuevos tratados y, en todo caso, se definan distancias mínimas de seguridad y, en caso de que se haga soterramiento se realice correctamente y, si es en vuelo, se instalen las medidas adecuadas de apantallamiento de los campos magnéticos.

Finalmente, Sanidad alerta sobre el excesivo nivel de carga emocional sobre este tipo de efectos nocivos por parte de algunos grupos de ciudadanos