Según informó hoy este departamento, en materia de lucha contra las intoxicacines alimentarias las comunidades autónomas con la coordinación de la Dirección General de Salud Pública del ministerio incrementan la inspección de establecimientos, el control de productos, la vigilancia epidemiológica de las enfermedades transmitidas por alimentos, o la implantaciónprogresiva en la industria de programas de autocontrol.

Una de las principales medidas de control es la red de alerta alimentaria que impide la comercialización y evita el consumo de productos alimenticios que puedan suponer riesgo para la salud del ciudadano. La red difunde urgentemente información útil para identificar, localizar e inmovilizar productos que puedan afectar a la salud.

Este sistema funciona en España desde 1987 y está orientado hacia productos alimenticios nacionales o importadosque se comercialicen en nuestro territorio. Como complenento, se realiza un control de alimentos importados en 18 puertos y 16 aeropuertos, donde se recogen muestras y se efectuan los análisis.

Comunidades autónomas y Administración central también colaboran en el Plan Nacional de Investigación de Residuos en Carnes, implantado en las industrias y establecimientos cárnicos para prevenir las enfermedades de trasmisión animal y evitar la intoxicación al utilizar sustancias prohibidas en el engorde del gnado.

El Ministerio de Sanidad también trabaja en la prevención del contagio de enfermedades durante viajes internacionales, en sus 42 centros de vacunación internacional.

Respecto a la vigilancia de las aguas de baño, tanto marítimas como continentales, existe un programa de control sanitario que cubre ayuntamientos de más de 500 habitantes de derecho, lo que representa algo más de 35 millones de personas y correspondientes al 91 por ciento de la población española.