SANIDAD Y 27 EMPRESAS ALIMENTARIAS FIRMAN UN CÓDIGO DE AUTORREGULACIÓN DE LA PUBLICIDAD DIRIGIDA A MENORES
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El Ministerio de Sanidad y Consumo y 27 empresas de alimentación y bebidas firmaron hoy un código de autorregulación de la publicidad dirigida a menores para establecer un conjunto de reglas que guíen a las compañías en el desarrollo, ejecución y difusión de sus anuncios para niños.
Según indicó la titular de Sanidad, Elena Salgado, tras la firma del código, el texto entrará en vigor el próximo 15 de septiembre y se enmarca en la Estrategia NAOS de prevención de la obesidad puesta en marcha recientemente por el Ministerio de Sanidad y Consumo.
El Código de Autorregulación de la Publicidad de Alimentos dirigida a menores prevé evitar mensajes que puedan inducir a error acerca de las características del producto o de los beneficios derivados de su consumo (por ejemplo, la adquisición de fortaleza, estatus, popularidad, crecimiento, habilidad e inteligencia).
Igualmente, pide que no se creen expectativas inalcanzables para los pequeños y que se diseñen mensajes adecuados a su nivel de comprensión, en los que no haya violencia y se utilice un lenguaje sencillo.
Además, este tipo de anuncios no debe hacer un llamamiento directo a los menores para que compren el producto anunciado, ni incitarles a que pidan o persuadan a sus padres o a otras personas para que compren los productos.
RECLAMOS PROHIBIDOS
El código de autorregulación indica también que en este tipo de publicidad no deberán aparecer personajes especialmente próximos a los menores y establece que el precio de los productos que se anuncien deberá expresarse clara y concretamente, sin utilizar reduccionismos como "sólo cuesta" o "nada más cuesta".
Señala también que los sorteos incluidos en los anuncios dirigidos a menores no deberán generar expectativas irreales sobre las posibilidades de ganar o sobre el premio que se puede obtener.
Igualmente, los anuncios deben evitar escenas, imágenes o mensajes que alienten el uso peligroso o inadecuado del producto anunciado, especialmente en aquellos casos en que tales conductas puedan ser fácilmente reproducidas por los niños.
El código prevé sanciones para quienes no lo cumplan, cuyo importe (entre 6.000 y 180.000 euros) se destinará a financiar el coste del programa de control y aplicación del código y a realizar campañas de educación y salud pública que promuevan hábitos saludables de alimentación y de actividad física.
(SERVIMEDIA)
01 Jun 2005
IGA