Así lo indicó el jefe del Ejecutivo desde Roma (Italia), en una comparecencia ante los medios de comunicación junto al primer ministro de Italia, Mario Draghi; el primer ministro de Portugal, António Costa; y el primer ministro de Grecia, Kyriakos Mitsotakis. “El momento de actuar es ahora”, advirtió.

Sánchez destacó de nuevo la importancia de “responder de manera contundente” y “con unidad” a la invasión por parte del presidente de Rusia, Vladimir Putin, de Ucrania. “Estamos jugándonos en este conflicto abierto de manera injusta e injustificada el modo de vivir que tenemos en Europa de libertad, democracia, justicia social y respeto al Estado de derecho”, señaló.

Ante esta “terrible invasión” rusa de Ucrania, Sánchez defendió que la UE reaccionó de forma “contundente” apoyando a Ucrania acogiendo a los millones de refugiados que en muy pocos días han tenido que desplazarse, además de sancionando al régimen de Putin y haciendo “todo lo que pueda estar en la mano de Europa para parar esta guerra”.

Tras la reunión de esta mañana, el presidente del Gobierno quiso resaltar el “apoyo total” a Ucrania y a su Gobierno por parte de la Unión y de los Estados miembro. De nuevo, subrayó “la unidad europea” también ante las consecuencias económicas y sociales fruto de esa guerra y aludió a la necesidad de dar “respuestas europeas a los problemas europeos”.

“Lo que no puede ser es que a las consecuencias de la guerra, que se traducen en un incremento también importante y una volatilidad insoportable de los precios de la energía y el gas, se responda de 27 maneras distintas en función de cuál sea el Estado miembro”, defendió el presidente del Gobierno.

Sánchez justificó esta postura alegando que “todos los países miembro” se ven “afectados de “igual manera” por esta crisis energética que ha provocado “una sola persona”, refiriéndose a Putin. “Tenemos que dar una respuesta europea y no 27 respuestas distintas en función de cuál sea el país a un problema común”, reclamó.

Igualmente, habló de la “corresponsabilidad” que opinó que están demostrando “todos” los Estados miembro ante “esta guerra de Putin”, algo que se puede ver en la crisis de refugiados. “España va a acoger a los refugiados que sean necesarios. Esta es una respuesta que también tenemos que dar desde un punto de vista conjunto”, sostuvo.

Sánchez hizo especial hincapié en “la implicación y la urgencia” para abordar las “vulnerabilidades”. “Si somos conscientes de que tenemos que redefinir de manera drástica nuestras relaciones como Unión Europea con respecto a Rusia es también evidente que Europa tiene que corregir sus vulnerabilidades y debilidades en el mercado energético”, apuntó.

En este punto, avisó de que es “clave” la seguridad del suministro y explicó que los cuatro países que hoy se han reunido ofrecen al resto de la UE todo su esfuerzo para lograr cuanto antes la diversificación de las fuentes de energía. “Somos conscientes por ejemplo del papel que puede jugar la Península Ibérica” ante “este reto”, dijo, y prometió hacer “todos los esfuerzos necesarios”.

“URGENCIA”

El presidente del Gobierno puso el foco en la “urgencia” a la hora de abordar la escalada de precios de la electricidad y del gas, y reconoció que la actual situación es “absolutamente inasumible para la economía, las industrias, las pequeñas y medianas empresas y para los ciudadanos de la Unión Europea”.

Recordó que el pasado septiembre los países hoy reunidos ya alertaron al resto de Estados miembro y también a las instituciones comunitarias de una escalada “desbocada” de los precios de la electricidad. “Por desgracia, hemos comprobado que no era una cuestión temporal, que tampoco era una cuestión circunstancial, ni por supuesto inocente”, dijo.

“Todos hemos puesto de nuestra parte para minimizar su impacto”, aseguró al hablar de lo hecho para tratar de mitigar y amortiguar las consecuencias del precio “desbocado” de la energía, la electricidad y el gas. En todo caso, señaló que es “evidente” que la guerra ha demostrado que “solo con respuestas europeas” se va a poder resolver este problema, “que es europeo”.

También consideró que hay que actuar de forma “urgente y decidida”. “No podemos esperar más allá del 25 de marzo y por eso es importante que salga no solamente el mensaje de que tenemos que actuar conjuntamente, sino que tenemos que hacerlo ya. Vamos tarde. Debíamos haberlo hecho antes”, reconoció Sánchez.

Por tanto, explicó que la decisión que comparten España, Italia, Portugal y Grecia en esta comparecencia conjunta es “trasladar al Consejo Europeo y a la Comisión Europea, que es quien tiene que poner encima de la mesa el conjunto de acciones para poder actuar, la urgencia” ante una situación “de emergencia económica y de emergencia social” que no se puede “tolerar más”.

Con la vista puesta en el Consejo Europeo del 24 y 25 de marzo, Sánchez llamó a trabajar en propuestas “concretas, factibles y ejecutables desde el punto de vista inmediato”. “Insisto, no podemos esperar un día más”, alertó el presidente del Gobierno, para quien dichas medidas tienen que “proteger” a las familias, a las empresas y al mercado energético europeo.

Posteriormente, Sánchez atendió de nuevo a los medios de comunicación y se reafirmó en la importancia de que en el Consejo Europeo de los días 24 y 25 de marzo se dé una solución que se pueda “ejecutar el día después en el conjunto de la Unión Europea”, y que suponga no “fragmentar” el mercado energético, sino actuar unidos contra este “precio común” que están sufriendo todas las economías europeas.

A partir de ahí, habló de aprobar ese plan nacional de respuesta a las consecuencias económicas de la guerra que se llevará al Consejo de Ministros el próximo 29 de marzo. “Estos son los pasos”, transmitió. “Primero tenemos que actuar sobre el origen de cuál es la razón del alza de los precios, que es el mal diseño de nuestro mercado energético europeo, y eso solamente lo podemos hacer a nivel europeo”, abundó.

Sánchez subrayó que espera que este plan se convierta en un “acuerdo del conjunto del país que transciende las fuerzas políticas, que implique también a los agentes sociales, a las comunidades autónomas y al resto de administraciones públicas”. Defendió aquí el “gran esfuerzo de diálogo nacional” con los sectores afectados para tener el 29 de marzo un plan “eficaz” que “corte de raíz” el “grave problema que está afectando a la economía” de España.