Investidura
Sánchez promete que sus acuerdos de investidura serán "transparentes" y "refrendados" por el Congreso
- Rechaza el referéndum de autodeterminación pero evita fijar posición sobre una amnistía
- Inicia mañana con Yolanda Díaz la ronda de contactos para su investidura, de la que excluye a Vox, para cerrar "cuatro años" de gobierno
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El presidente del Gobierno y líder del PSOE, Pedro Sánchez, aceptó este martes el encargo del Rey de intentar la investidura, para lo que buscará acuerdos con las demás formaciones políticas que serán “transparentes” y “refrentados” por el Poder Legislativo y dando por hecho que en último término podrían ser revisados por el Tribunal Constitucional si la oposición los recurre.
Tras ser recibido en audiencia por el Rey, Sánchez compareció en el Palacio de la Moncloa y explicó que trabajará para articular en el Congreso “no solamente una mayoría para la investidura”, sino “una mayoría de legislatura que dé un Gobierno a España y dé estabilidad al país durante los próximos cuatro años”.
Para ello, comenzará mañana mismo una ronda de contactos con “todos” los partidos, a excepción de la “ultraderecha” de Vox, para escucharlos en el Congreso de los Diputados y “a partir de ahí” el PSOE “se posicionará” sobre sus respectivas demandas. Esta ronda con los grupos parlamentarios permitirá imágenes inéditas de Sánchez con portavoces o líderes de algunas formaciones como el caso de EH Bildu y Junts.
En esta ronda, Sánchez espera verse con el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, salvo que este elija otro interlocutor para la reunión con el PP, aunque avanzó que no le pedirá el apoyo, ni apelará "a la peor de las corrupciones, el transfuguismo", sino que abogará por el "sentido común" y por "desterrar el insulto y la descalificación de la conversación y la disputa política".
En este contexto, el líder socialista dejó claro que “todo lo que hagamos” estará “dentro de la Constitución y todo lo que hagamos servirá para ese fin común, que tiene que ser trabajar en aras de la convivencia y la concordia”.
"Los españoles tienen que tener las garantías de que, pese a que lógicamente las conversaciones tienen que ser discretas, los acuerdos serán transparentes y conocidos. Tanto es así que tienen que ser refrendados por el poder legislativo y seguro, porque ha ocurrido en la pasada legislatura, que hasta el Tribunal Constitucional se tendrá que pronunciar”.
DENTRO CONSTITUCIÓN
De esta manera dejó claro Sánchez que lo que se cierre, principalmente con los partidos independentistas, estará bajo el paraguas de la Carta Magna, pese a que en su comparecencia evitó decir –como sí lo hacía antes- que no cabe en la misma una amnistía para los implicados en el desafío soberanista en Cataluña de 2017, cosa que demandan partidos como ERC y Junts.
Lo que sí despejó Sánchez de las pretensiones de estas fuerzas independentistas es un referéndum de autodeterminación. Lo hizo tras mostrarse orgulloso de la decisión política que tomó en junio de 2021 con los indultos a los líderes condenados porque los “efectos beneficiosos” que auguró con esa medida, la situación de hoy en Cataluña “constata” que fue una decisión “acertada y bien tomada en aras del interés general”.
El jefe del Ejecutivo en funciones defendió que la situación de hoy en Cataluña “nada tiene que ver” con la que había cuando en 2018 se hizo con el Gobierno y “en esa senda” va a seguir porque “es la senda de la política, y hacer política implica generosidad, compromiso con tu país, y liderazgo”.
“Política, generosidad, compromiso y liderazgo es a lo que tenemos que ser convocados todos los que queremos resolver, en una democracia como la española, un problema político como el que hemos sufrido. Y en ese contexto siempre lo he dicho, no porque no solamente no lo contemple la Constitución, sino porque es contrario a lo que yo he defendido siempre con mi palabra y con mi acción un referéndum de autodeterminación”, remachó.
A su juicio, la sociedad catalana demanda “pasar página de esa situación y provocar un reencuentro entre los catalanes y entre las instituciones catalanas y el conjunto de la sociedad española y es ahí donde nos vamos a mover”. “No solamente por compromiso constitucional sino por una convicción política”, sentenció ante la pregunta sobre las exigencias de un referéndum.
No obstante, ante la cuestión sobre la amnistía, el presidente ni mencionó la palabra y se aferró a “todo lo que hagamos, lógicamente será dentro de la Constitución y servirá para ese fin común, ahí están los hechos constatables, tiene que trabajar en aras de la convivencia y la concordia entre españoles”.
RONDA PARA CUATRO AÑOS
Sánchez se mostró “ilusionado” y “con ganas” de asumir este encargo para el que va a trabajar “intensamente” para que sea una “real” y no una “postiza” como, a su entender, ocurrió durante la de Feijóo. Una investidura que terminó en fracaso la semana pasada y que ha supuesto que el país esté cinco semanas “perdiendo el tiempo”.
Aunque no puso fecha para su debate de investidura, reconoció que le gustaría que fuera “cuanto antes” y que van a trabajar “intensamente” para cerras acuerdos en unas negociones “no fáciles” y que admitió “complejas” pero que espera que fructifiquen en pactos que permitan, no solo una investidura de un gobierno de coalición sino toda una legislatura de cuatro años.
El presidente se mostró seguro de haber entendido el mensaje de las urnas del 23 de julio que, a su entender, fue que "no se puede ser presidente (en España) sin entender la pluralidad ni la diversidad de la nación". "Es la hora de la política, que es la que no ha hecho el PP, del compromiso con el país, de la generosidad" para buscar "entre todos una fórmula de un gobierno no para una investidura sino para una legislatura. Es la hora del liderazgo y eso tenemos que ejercerlo todos", concluyó.
(SERVIMEDIA)
03 Oct 2023
MML/MFN/pai