Salgado, que participa esta semana en Santander en un curso sobre el control de la oferta de drogas y la reducción de la demanda en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, calificó sin embargo de "sorprendente" que, "al tiempo que se pide más dinero para la financiación de la sanidad, haya quien diga que en algunas comunidades autónomas se va a proceder a hacer deducciones fiscales" como la propuesta por el PP para los fabricantes de genéricos.

"Ellos tienen su papel y yo el mío", afirmó Salgado, que limitó su labor a "plantear una buena ley que permita un uso racional del medicamento" e intentar que salga adelante "con el máximo consenso posible (...), también el del Partido Popular", cuando llegue al Parlamento en el mes de septiembre.

TRIBUNAL DE CUENTAS

En cuanto al informe del Tribunal de Cuentas en el que se señala el descontrol hasta 2002, por parte del Gobierno, de bienes incautados en operaciones antidroga, la ministra consideró que esta falta de rigor es "especialmente grave" si se tiene en cuenta "que esos fondos tenían que ser dedicados a reducir los niveles de drogadicción en nuestro país".

"Lo que puedo decir es que desde que hemos llegado al Gobierno, las cosas se hacen de una manera muy distinta", apuntó Salgado, quien explicó que ahora "los protocolos son estrictos y no permiten que después no se sepa qué ha pasado con el dinero, con unas joyas o con unos bienes decomisados".

Asimismo, prosiguió, "hemos dotado de una mejor gestión y mayor agilidad a los procedimientos, porque creemos que esos bienes decomisados deben ponerse cuanto antes al servicio de la finalidad que determina la ley que lo regula, es decir, aportar fondos a las comunidades autónomas", que este año percibirán 10 millones de euros procedentes de la liquidación de lo incautado durante el pasado año.

CANNABIS TERAPEUTICO

Por otra parte, la ministra de Sanidad y Consumo se refirió a la entrada en vigor en septiembre de un programa piloto por el que algunos hospitales de Cataluña distribuirán tratamientos a base de cannabis entre algunos pacientes.

Recordó que esta sustancia estupefaciente se empleará "con unas condiciones muy estrictas", en hospitales previamente seleccionados y para un tipo de indicaciones muy concreto, como pacientes oncológicos que sufren vómitos tras la quimioterapia, en un formato "que nada tiene que ver con las formas en que se consume el cannabis para uso lúdico".

Agregó que el cannabis se distribuirá en forma de comprimido durante un año, periodo durante el que se prolongará la experiencia piloto y al cabo del cual "evaluaremos los resultados y veremos si hay que hacer una modificación o algún estudio piloto más".