Según los datos hechos públicos hoy por el Banco de España, esta posición, resultado de la diferencia entre los activos y los pasivos externos de España, supone el 47,1% del PIB español.

Esta evolución estuvo condicionada, según el supervisor, por el aumento de los pasivos exteriores de los sectores residentes, excluido el Banco de España, que superó el incremento de los activos, con la excepción de las Administraciones Públicas, cuya posición deudora neta disminuyó ligeramente.

Por su parte, el saldo acreedor neto del Banco de España aumentó un 15% en el primer trimestre del año, hasta situarse en 83.012 millones de euros.

No obstante, excluido el Banco de España, la economía española registró una posición deudora neta de 537.695 millones de euros en el primer trimestre de 2006, un 8,8% superior a la de final de 2005.

Asimismo, hasta marzo, el saldo acreedor neto de la inversión directa pasó de 11.582 millones de euros al final de 2005 a 35.929 millones.

Esto supone una "significativa" ampliación de la inversión directa que alcanzó los 353.041 millones de euros, un 1,8% más respecto al cuarto trimestre de 2005.