A la salida del hotel, el inspector jefe de informacón de la coisaría de Granada, en compañía de dos agentes, procedió al arresto de José María Ruiz Mateos, que no ofreció resistencia. Tan sólo se limitó a asegurar ante un grupo de periodistas que "los jueces son unos indeseables y unos marranos" y que en España ya no hay justicia, porque "es cochambrosa e indignante".

La detención de Ruiz Mateos se basa en la supuesta denuncia falsa que el ex presidente de Rumasa presentó contra Mariano Rubio y Miguel Boyer, a quienes imputaba poseer cuentas con dinero negro en uiza.

Tras la orden de búsqueda y captura dictada por el juzgado de instrucción número 25 de Madrid, Ruiz Mateos huyó a Andorra. Según fuentes próximas al caso, después de su detención en Granada, se le informó de otros asuntos que tiene pendientes con la justicia, entre ellos uno abierto por los insultos proferidos contra un juez a quien llamó "lacayo del Gobierno".

Ruiz Mateos no pudo prestar declaración inmediante ante el juzgado de Granada por la ausencia del secretario judicial, por lo que ee trámite se realizará a lo largo de la tarde. El empresario calificó de "chorrada" todo el procedimiento.