De momento, argumentan estas fuentes, los informes del Tribunal de Cuentas sobre las finanzas del PP nacional y catalán en 1991 no reflejan asientos contables provenientes del ex responsable de KIO en España. Nada, por tanto, de los 200 millones que dice De la Rosa haber dado a Rodrigo Rato ese año.

La únca duda pendiente, insisten, es si el hoy delegado del Gobierno en la Zona Franca del Puerto de Barcelona, Enrique Lacalle, recibió el dinero que le pedía por carta a De la Rosa para completar los 24.050.000 pesetas que le remitió Madrid para su campaña a la Alcaldía de Barcelona en aquel año.

Si Lacalle cobró los "10 o 15 más" que pedía a De la Rosa en sus polémicas cartas, lo hizo através de una donación anónima -no aparecería como nominal- y ese dinero no deja rastro.

El PP, sin embargo, eludehablar de caso cerrado todavía, porque eso sería desvirtuar la realidad y quedaría en evidencia si mañana salen más datos. Tesorería y Organización del partido siguen investigando el rastro del dinero recibido en los últimos años.

Respecto a las responsabilidades políticas, la Dirección Nacional del PP entiende que, de lo investigado hasta ahora, no se desprende ninguna ilicitud de Lacalle y sí una correspondencia con Javier de la Rosa en un tono inadecuado y sus manifestaciones, el jueves pasado, dicendo que no piensa dimitir porque todos los partidos han pasado "el platillo" pidiendo dinero.

Sólo por estas dos cuestiones y sin un acto ilegal demostrado, desde Madrid no se le va a cesar ni se le va a pedir públicamente que se vaya. "Dependerá de él" una posible dimisión, añaden las fuentes consultadas.