Según Romero, el secretario general del PSOE, Joaquín Almunia, se ha unido a Borrell, "porque desde las sedes socialistas del País Vasco, Madrid y Cataluña, con Pascual Maragall a la cabeza, saben lo contraproducente que supone la presencia de González ligado al "caso Marey", ante las elecciones autonómicas que se avecinan".

Asimismo, dijo que Borrell no iba a segir soportando que se le relege a un tercer plano, "por lo que se ha unido alsector de la ejecutiva que se encuentra muy molesto porque consideran que el ex presidente del gobierno socialista arrastrará al desasatre al PSOE con su inicativa". "Estamos ante el primer y más fuerte pulso entre Borrell y González", agregó.

Además, expresó que la salida que le darían a González es que no podría actuar sin que el Poder Legislativo haya aprobado la compatibilidad de los ejercicios de diputado y abogado y, "cuando lo hiciese, ya sería tarde para el recurso, porque el Congreso está en eriodo de vacaciones".

BARRIONUEVO Y VERA SIN APOYOS POLITICOS

También, señaló que para José Barrionuevo y Rafael Vera empieza un periodo "muy duro" porque no van a contar con apoyos políticos. "Sólo se les apoyará humanamente, económicamente (con una colecta para pagar la idemnización a Segunado Marey) y jurídicamente, con la asesoría del partido en temas de defensa y apoyos a los recursos que inmpongan los sentenciados".

Finalmente, indicó que si Borrell se "desliga" del pasado, "que todavía stá representado con Felipe González", y muestra una cercanía a IU en algunos puntos, "las fuerzas de izquierdas de este país podrán ponerle muy difícil la aprobación de los Presupuestos Generales de 1999 al Gobierno".