Más de 1.500 militares participaron en el dispositivo de emergencias desplegado por el Gobierno de Canarias tras la erupción del volcán el 19 de septiembre del año pasado, una catástrofe natural que sepultó casi 3.000 edificaciones, 300 hectáreas de plataneras y aguacates y destruyó los hogares y el modo de vida de miles de palmeros.

El volcán Cumbre Vieja estuvo en erupción durante 85 días, hasta el 13 de diciembre, provocando la evacuación de 7.000 vecinos, y por ello la titular de Defensa quiso transmitir un mensaje “de esperanza y de confianza” en el futuro a los habitantes de la isla.

La ministra, que iba acompañada de la secretaria de Estado de Defensa, Esperanza Casteleiro, comenzó su visita en el acuartelamiento ‘El Fuerte’, que fue habilitado por el Ejército de Tierra en los primeros días de la erupción para recibir a las personas desalojadas de sus casas, en muchos casos con movilidad reducida o necesidades especiales, ante el avance de las coladas de lava que arrasaban cientos de hogares.

Los miembros de las Fuerzas Armadas que participaron en el dispositivo pertenecían en su mayoría a la Unidad Militar de Emergencias (UME), pero también había efectivos del Ejército de Tierra, la Armada y el Ejército del Aire, que se pusieron en marcha desde el primer día de erupción ayudando en la evacuación de zonas afectadas, retirando cenizas de los tejados para evitar derrumbamientos o en colaboración con la Agencia Estatal de Meteorología para el seguimiento de las erupciones y la detección de gases emitidos por el volcán.

La Armada, entre otros recursos, habilitó tres lanchas de desembarco con las que trasladó a más de 3.000 agricultores y regantes a sus cultivos ante la imposibilidad de acceder por carretera. Tras cuatro meses de despliegue en La Palma, la UME fue desmovilizada el pasado 18 de enero.

La titular de Defensa se trasladó después hasta Los Llanos de Aridane, donde fue recibida por su alcaldesa, Noelia García, y por el presidente del Cabildo de La Palma, Mariano Hernández. También se encontró allí con los alcaldes de Tazacorte, Juan Miguel Rodríguez, y de El Paso, Sergio Rodríguez.