Las mismas fuentes indicaron que sea cual sea la decisión que se adopte, los intereses de Gas Natural "no son los de convertirse en una operadora de telecomunicaciones", sino en "rentabilizar al máximo nuestros activos".

Otras fuentes apuntan a que el interés de Gas Natural se centraría en lograr un acuerdo de alquiler de infraestructuras para la extensión de la reddel futuro segundo operador. Y en ese senido se inscriben los contactos mantenidos con el grupo en el que participa el Banco Central Hispano (BCH).

El grupo gasista también ha mantenido contactos con los propios responsables de Retevisión para tener un mayor conocimiento del proyecto y analizar las posibilidades de que su presencia en un consorcio que opte a la privatización casa con los intereses que se ha fijado en el sector de las telecomunicaciones.

Hasta el monento, los intereses por la privatización de Retevisión se concretan en e consorcio formado para este motivo por el BCH junto a las operadoras Deutsche Telekom (DT) y France Telecom (FT). Además, mantiene negociaciones avanzadas para que la nortemaricana Sprint se sume al proyecto.

Dicho consorcio ha señalado que existen objeciones serias al proceso planteado por el Gobierno, ya que consideran "demasiado alto el precio de salida" que se fijado para el 60% del segundo operador -45.600 millones de pesetas- "sin que ello asegure un control de la operadora, dado que el Estado onservará un 40% y en el capital del consorcio abrá previsiblemente socios bajo la órbita estatal -en referencia a Endesa-".

En éste sentido, desde France Telecom se ha hecho llegar al Gobierno la idea de que "se podría ir a una negociación directa para entrar en el 'segundo operador' si el concurso queda 'descafeinado' para la presentación de una sóla oferta", la configurada por el grupo en el que participa junto al BCH y DT.