Gallardón ha abrazado cariñosamente tanto al viudo de la chipionera, el torero José Ortega Cano, como al hermano de la difunta, Amador. Los cientos de personas que están allí congregados, esperando la llegada del féretro, para tributarle el último homenaje a "las más grande", han comenzado a aplaudir de forma espontánea.

Decenas de periodistas de España y del extranjero, sobre todo de Latinoamérica esperan la llegada de las personalidades que se acercarán a lo largo de todo el día a dar el pésame a la familia Jurado.

La Policía ha desplegado un dispositivo de seguridad en el Centro Cultural de la Villa similar al que montó cuando murió Lola Flores, que también fue homenajeada en el mismo lugar. Además un helicóptero sobrevuela la zona.

El Samur tambien ha montado un hospital de campaña en la Plaza de Colón para atender posibles emergencias, sobre todo, desvanecimientos provocados por la emoción.