Según informaron hoy a Servimedia fuentes de Emergencias 112, un ganadero del pueblo serrano de San Mamés encontró esta mañana a una vaca de su ganado que había perdido tres días atrás, y que se encontraba en un paraje conocido como la Chorrera de San Mamés, la cascada más importante de toda la Comunidad de Madrid.

El animal se precipitó unos seis metros y quedó atrapado entre las rocas de la parte alta de la cascada de San Mamés, de manera que no podía moverse ni comer ni beber, pese a que corría el agua de un arroyuelo a apenas un metro de su alcance.

Tras la llamada del ganadero al teléfono de emergencias 112, se desplazaron hasta el lugar cinco efectivos del GERA (Grupo de Rescate en Altura de los Bomberos de la CAM), así como un helicóptero, para realizar la operación de rescate.

Al llegar hasta el lugar, los bomberos vieron que la vaca se encontraba muy nerviosa, por lo que tuvieron que sedarla. En sus primeras maniobras, el bovino mugía con intensidad, por lo que los bomberos pasaron una cuerda por sus cuernos para evitar que el animal cayera más metros.

Cuando la vaca perdió la consciencia, los bomberos se pusieron a su altura y le instalaron un arnés especial de rescate para reses.

Posteriormente, reclamaron la presencia del helicóptero del GERA, que izó al animal hasta dejar a la vaca en la pradera, donde, aun con algunas magulladuras, comenzó a andar, a comer hierba y se unió a sus compañeras.