Se trata de los dos primeros servicios de alta velocidad prestados por la compañía española que circulan más allá de los Pirineos, después de que el pasado diciembre dejaran de circular los trenes con los que ofrecía estas mismas rutas en colaboración con la compañía francesa SNCF.

Renfe y SNCF ofrecieron esas rutas conjuntas durante 9 años, en los que transportaron a 5,5 millones de pasajeros. Tras la ruptura de su alianza, la operadora francesa empezó a ofrecer la ruta entre Barcelona y París en solitario de forma inmediata.

Sin embargo, Renfe no ha podido empezar a operar en solitario en Francia hasta ahora, una vez obtenidos todos los permisos necesarios. Después de empezar a operar solo los fines de semana, a partir de otoño su oferta alcanzará las 9.700 plazas semanales.

El servicio AVE de la ruta Madrid-Marsella conectará las estaciones intermedias de Guadalajara Yebes, Zaragoza Delicias, Camp de Tarragona, Barcelona Sants, Girona, Figueres Vilafant, Perpiñán, Narbona, Béziers, Montpellier-St-Roch, Nîmes, Aviñón-TGV y Aix-en-Provence. El trayecto, de unas ocho horas, saldrá de Madrid a las 13.25 y de Marsella a las 08.03 de la mañana.

Por su parte, el servicio AVE entre Barcelona y Lyon conecta las estaciones de Barcelona Sants, Girona, Figueres Vilafant, Perpiñán, Narbona, Béziers, Montpellier-St-Roch, Nîmes, Valence TGV y Lyon Part Dieu, con salida desde la Ciudad Condal a las 8.22 horas de la mañana y vuelta desde Lyon a las 14.30 horas de la tarde. El tiempo de viaje de la ruta completa es de cinco horas.

En septiembre en la ruta de Lyon y en octubre en la ruta de Marsella, Renfe comenzará a operar sus trenes AVE de lunes a domingo y ofrecerá 28 circulaciones semanales. Entre Barcelona y Nimes, ruta compartida por las dos líneas, Renfe contará con cuatro trenes diarios que permitirán una combinación de horarios y tiempos de viaje que atraiga a los trenes AVE al público a ambos lados de la frontera.