Estos nuevos contratos, realizados en virtud de las medidas acordadas con el Ministerio de Defensa para facilitar la incorporación de militares a la vida civil, han ido dirigidos a militares profesionales que se encuentran en sus últimos diez años de su contrato de larga duración, o también reservistas de especial disponibilidad.

De los 308 nuevos trabajadores que han llegado a Renfe procedentes de las Fuerzas Armadas en tres convocatorias de empleo realizadas en 2019, 2023 y 2024, un total de 230 ocupan puestos como operadores comerciales de ingreso, mientras que los 78 restantes son operadores de ingreso de Ingeniería y Mantenimiento.

En las tres convocatorias celebradas hasta ahora, los que hayan optado a una plaza de operador comercial han tenido que acreditar estar en posesión de una titulación académica mínima de Bachillerato o su equivalente a efectos laborales.

Por su parte, los aspirantes a una plaza en Renfe Ingeniería y Mantenimiento han tenido que acreditar estar en posesión de una titulación de Formación Profesional de Grado Medio o Superior en alguna de las titulaciones de la familia de Electricidad-Electrónica o de Automoción, o sus equivalentes a efectos laborales. Todas las personas deben tener disponibilidad geográfica nacional y para realizar trabajo a turnos.

En línea con las medidas adoptadas por la Comisión de Defensa del Congreso de los Diputados, los aspirantes han tenido que facilitar una certificación emitida por parte del Ministerio de Defensa en la que conste el historial de la formación recibida que incluya la carga lectiva y su contenido curricular teórico y práctico.

Además, los aspirantes a operadores comerciales deberán acreditar el nivel de idioma solicitado y certificado oficial que acredite dicho nivel.