Los bomberos madrileños, algunos de los cuales se encontraban de vacaciones, han trabajado, junto a otras dotaciones españolas, "para acabar con una situación dantesca de aldeas amenazadas y gentes que perdían sus viviendas y el monte", declaró el jefe del contingente, Fernando Macías.

El relevo de los 16 bomberos ya se encuentra en tierras gallegas, junto a dos bombas de pasto específicas para fuegos forestales, un tanque con capacidad para 5.000 litros de agua y un coche de mando.