Además de los trabajos de reconstrucción de la Puerta, realizados con moldes a partir de los antiguos planos de la cancela y la cerrajería facilitados por la Junta del Distrito, que se hizo partícipe de la demanda de los vecinos, también han sido restaurados los dos pabellones laterales y urbanizado los accesos, con un presupuesto de 110.676 euros.

La concejala de Gobierno de Urbanismo, Pilar Martínez, visitó hoy el nuevo monumento, que está localizado en la confluencia de la calle de Manuel Lamela con General Ricardos, acompañada por los concejales de Vivienda, Sigfrido Herráez, y del distrito, Carlos Izquierdo.

La antigua puerta de hierro forjado fue realizada en el siglo XIX y desapareció en la década de los 80 por un accidente de tráfico. La antigua propiedad real de Vista Alegre fue adquirida por el Ayuntamiento de Madrid en 1829 y ofrecida como regalo de boda a la cuarta esposa de Fernando VII, la reina María Cristina de Borbón, quien la amplió adquiriendo otras fincas colindantes. En la actualidad pertenece a la Comunidad de Madrid.

Este recinto también recibe el nombre de Finca de Salamanca, porque fue adquirido más tarde por el Marqués de Salamanca, quien lo dotó de abundante agua procedente del Canal de Isabel II y lo transformó en un jardín y una arboleda. En 1887 fue adquirida por el Estado y en 1889 la reina María Cristina de Austria inauguró en las dependencias del palacio el Asilo de Inválidos del Trabajo.

Más tarde, la finca albergó el Colegio de la Unión dedicado a huérfanas militares. Desde la regencia de María Cristina, Vista Alegre ha albergado en su interior distintos pabellones de atención social para discapacitados, huérfanos y ciegos. En la actualidad, debido a sucesivas reparcelaciones, desarrollo urbano y construcciones que ha sufrido la finca original, la "Puerta Bonita" ha quedado segregada de la misma.