Según sus cálculos, de proseguir la actual tendencia, este año se dejarán de ingresar 300.000 millones de pesetas en comparación con lo recaudado en 1997.

Los subinspectores, que han obtenido esta conclusión a partir de los datos suministrados por el subdirector general de Planificación y Coordinación de la Agencia Tribtaria, Tomás Rico, explicaron que estas estadísticas significan que las arcas públicas han dejado de ingresar 1.000 millones diarios en relación con el año pasado.

"Las autoridades de la Agencia Tributaria han ocultado a la opinión pública el fracaso registrado este año en la lucha contra el fraude fiscal", afirmó el citado colectivo.

La asociación puso de manifiesto la confusión existente en los objetivos que se ha marcado Hacienda para este año, puesto que el Plan Nacional de Inspección pretend someter a control a 58.793 contribuyentes, un 21% menos que en 1997.

"Por si esto fuera poco, los datos reales de 1998 indican que el número de inspecciones realizadas durante el primer semestre ha sido de 5.770, tan sólo un 9,8% del objetivo anual", añadió.

Los subinspectores achacaron esta situación a "la incompetencia de los gestores de la Agencia", que ha limitado el trabajo de este colectivo "a la mera toma de datos". El resultado de esta "infrautilización" ha sido la reducción "drástica" e los expedientes comprobados.

Ante el "colapso" producido, este colectivo advirtió sobre el peligro de que se acumulen los expedientes y de que prescriban las actuaciones inspectoras.

Por último, denunciaron que los responsables de la Agencia Tributaria, "en un alarde de prepotencia y autoritarismo", se niegan a negociar con la Asociación la solución a este problema.