Durante su discurso de clausura del XVI Congreso Nacional que el PP ha celebrado este fin de semana en Valencia, Rajoy aseguró que España "necesita un nuevo espíritu" que aporte "dinamismo y confianza" para poner fin a la etapa de los que "han querido resignar" a los ciudadanos.

Rajoy advirtió en especial de la necesidad de adoptar medidas económicas para hacer frente a una crisis "mucho peor que complicada" y de la que culpó a Zapatero por la "desidia" demostrada en los últimos meses ante el fin del superavit, el incremento del paro, la falta de productividad, la caída de las bolsas, el aumento de los precios y la subida de las hipotecas.

Advirtió de que Zapatero, al que criticó porque "como mínimo disimula o minusvalora" la realidad de la economía, ahora "no puede refugiarse en la herencia" recibida por el gobierno de la pasada legislatura, ya que considera que ha sido él quien ha empujado a España a esta situación.

Rajoy reiteró también su disposición a llegar a acuerdos con el Gobierno y con otras formaciones políticas sin más límite que la Constitución. En este sentido, ofreció un pacto de estado a Zapatero contra el terrorismo, sobre política exterior, sobre el modelo territorial y sobre el sistema de bienestar.

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