Estas fueron las dos principales propuestas de Rajoy en su primera intervención durante el Debate sobre el Estado de la Nación, en el que esta tarde se midió cara a cara con el presidente del Gobierno.

Rajoy adujo que España tiene "uno de los mercados de trabajo más rígidos, anquilosados e improductivos del mundo" y por eso requiere "profundizar" en las medidas aprobadas por el Partido Popular en 1997 para favorecer el empleo o de lo contrario "será muy difícil volver" a la senda de la creación de puestos de trabajo estables.

"Es preciso abordar la reforma laboral para crear empleo. No hay nada más importante, ni más social, ni más solidario, ni más nada. Aquí la reforma laboral se mide si la voluntad de crear empleo es genuina o se queda en meras proclamas para ganar tiempo y salir del paso", dijo.

Rajoy sacó a relucir las medidas del plan anticrisis redactado por el Partido Popular como el camino a seguir para superar la actual coyuntura económica, aunque no entró a detallar las mismas con el argumento de "falta de tiempo".

Recordó el "deliberado y mezquino cálculo electoral" con el que el PSOE negó la crisis en la campaña de las generales de 2008 y señaló que desde entonces las palabras con las que desmentía la desaceleración de la economía "le perseguirá siempre como fantasmas".

Rajoy reprochó a Zapatero que en los últimos meses no haya hecho "nada de nada, de nada, de nada, de nada", salvo poner en marcha planes de medidas "de forma errática, demagógica y despilfarradora" con el presupuesto público.

BAJAR LOS IMPUESTOS "DE VERDAD"

Rajoy también demandó "una reforma fiscal de verdad" en lugar de la reducción con condiciones del Impuesto de Sociedades anunciada esta mañana por Zapatero para las pymes, la cual tiene un "limitado alcance".

"Podrá usted improvisar, invertarse medidas nuevas todos los días y arruinar a los españoles, pero no logrará ningún resultado. No quiso hacerlo cuando pudo. No pretenda arreglarlo ahora con cuatro gestos", añadió en alusión a las nuevas medidas anunciadas por Zapatero durante el Debate.

El líder de los populares aseguró que "lo que procede es gastar menos y gastar mejor, como hacen las empresas y las familias españolas" en lugar de incrementar el gasto público en tiempos de crisis.

Tras el paquete de medidas anunciadas por Zapatero, Rajoy advirtió de que "los gestos aislados no son eficaces y nos salen muy caros" porque "de nada sirve que nos anuncie una nueva medida cada media hora si no es capaz de articular un proyecto global".

En particular, Rajoy pidió un "plan completo y coherente" en lugar de regalar un ordenador portátil a cada alumno o instalar pizarras digitales en las escuelas. Más importante que eso, subrayó, es "lo que se escriba en ellas" y la "calidad" del sistema educativo.

Rajoy dio la bienvenida a los portátiles para cada alumno pero recordó que Zapatero ya prometió "uno por cada dos" estudiantes en las elecciones generales de 2004 y todavía no lo ha hecho realidad. "Espero que esta vez cumpla su promesa", apostilló.

PROTEGER LAS PENSIONES

El presidente del PP pidió también una reforma del sistema de pensiones porque el actual "está en peligro y pudiera desaparecer muy pronto" a raíz de las predicciones del gobernador del Banco de España.

Subrayó que la Seguridad Social ha perdido en menos de un año 1,2 millones de afiliados, lo que significa que "disminuyen los ingresos y crecen los gastos" de prestaciones públicas.

Rajoy abogó igualmente por un cambio del modelo energético, además de la reforma fiscal, laboral y educativa, y pidió ponerlas en marcha rápidamente porque "cuanto más tarde, peor".

Avisó a Zapatero de que "las excusas no le van a durar siempre, ni las cortinas de humo ni los gestos grandilocuentes ni los vaticinios engañosos ni siquiera la descalificación de quienes le critican".

Para terminar, Rajoy volvió a sacar en un par de ocasiones el cuaderno con las medidas de su plan anticrisis para ofrecérselo al presidente del Gobierno y retarle a aceptar las ideas que incluye, algunas de las cuales son casi idénticas a las propuestas por el propio Zapatero en el Debate sobre el Estado de la Nación.