Las administraciones autónomicas aportarán la mayor parte de estas ayudas, un total de 217.000 millones de pesetas, mientras que la Administración central dispone de un presupuesto de 121.000 millones de pesetas. En este capítulo están incuidos los 73.600 millones de pesetas con cargo a los fondos estructurales de la Unión Europea.

Según las estimaciones realizadas por los técnicos, alrededor de 150.000 empresas podrían beneficiarse de estas ayudas, que generarán una inversión inducida superior a los dos billones de pesetas.

De los 338.000 millones de pesetas previstos en concepto de ayuda a las pymes, 154.000 millones corresponden al capítulo de redes territoriales de ayuda, en el que se fomenta la constitución de sociedades de grantía recíproca, de reafianzamiento y de capital riesgo.

Los proyectos de cooperación empresarial recibirán unas ayudas de alrededor de 50.000 millones de pesetas, cantidad similar a la destinada para los proyectos de impulso del producto industrial, así como al área de financiación de las pymes.

Finalmente, los programas destinados a proporcionar una información detallada y a la creación de bases de datos de interés empresarial contarán con una partida presupuestaria de 28.000 millones de pesets en los próximos seis años.