El trabajo de campo de este barómetro, correspondiente al mes de abril, se hizo entre los días 24 y 30 de ese mes, es decir, un mes después del anuncio de alto el fuego de ETA y apenas dos semanas después de la crisis de Gobierno.

Según este sondeo, si hoy se celebraran elecciones generales, el PSOE obtendría el 40,3% de los votos, siete décimas más del 39,6% que reflejaba el último barómetro, tres meses atrás.

El Partido Popular obtendría el 38,2%, dos décimas más que hace tres meses, por lo que la distancia entre ambos pasaría de 1,6 a 2,1 puntos.

Izquierda Unida también incrementa su respaldo, al pasar del 4,8% al 5,4%, mientras que CiU desciende del 3,6% al 2,9% y también lo hace Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), del 2,4% al 2%. El PNV se queda prácticamente igual, de 1,5% a 1,4%.

El voto directo en la encuesta también ha experimentado algunas variaciones. El PSOE ha subido del 29,5% al 34,4%, el PP del 22,2% al 22,9%, e Izquierda Unida del 3,3% al 3,7%. CiU se mantiene en el 1,5%, ERC en el 1,2%, y el PNV en el 1%.

El sondeo se hizo a partir de 2.481 entrevistas a ciudadanos mayores de edad de 228 municipios y 49 provincias entre los días 24 y 30 del pasado mes de abril.