La propuesta fue presentada en rueda de prensa por los diputados socialistas Guillermo Hernández Cerviño e Isabel López i Chamosa, acompañados pr los miembros masones Alvaro Marcos, portavoz del Consejo Supremo del Rito Escocés, y Ricardo Aldao.

El PSOE reclama un homenaje "a todas aquellas personas y colectivos que, en defensa de las libertades políticas y de pensamiento fueron perseguidas y represaliadas", y un reconocimiento "a aquellos masones y obediencias masónicas que, a lo largo de la historia reciente de nuestro país, han sido agraviadas injustamente".

Los socialistas recordaron que la ley de 1940 de represión de la masonería y el comunismo constituyó "una más de las agresiones" que ha sufrido este colectivo.

"Su defensa de la tolerancia, del respeto a uno mismo y a los demás, así como de la más absoluta libertad de pensamiento y de conciencia, no han sido del gusto de las monarquías totalitarias de otras épocas, ni de los sectores más reaccionarios de la sociedad. La leyenda negra, fabricada a su alrededor, desató todo tipo de persecuciones, tanto intelectuales como físicas", precisaron.

Sin embargo, agregaron que, tamién es cierto que, "quizá exageradamente", se atribuye a los masones el espíritu de la Constitución de los Estados Unidos, la Declaración Universal de los Derechos Humanos y toda una lista de movimientos internacionales.

España, según rememoraron los socialistas, fue el primer país fuera del territorio británico donde se creó una logia, el 15 de febrero de 1728.

De hecho, prosiguieron, son muchos los grandes nombres de la historia de España vinculados a la masonería, como Práxedes Mateo Sagasta, anuel Azaña, Vicente Blasco Ibáñez, Fernando de los Ríos, Juan de la Cierva, José Ortega y Gasset, Juan Prim, Ramón y Cajal, Rodolfo Llopis, Pi i Margall, Casares Quiroga, y muchos otros ciudadanos.

Como muestra de la relevancia de la masonería en España, los socialistas subrayaron que, del total de los 458 parlamentarios que formaban las Cortes Cosntituyentes de 1931, 183 eran masones, es decir, un 30 por ciento.

Después de la persecución sufrida durante el franquismo, los socialistas considerannecesario que la consolidación de la democracia vaya acompañada de "un acto de desagravio" sobre estas personas que defendieron siempre los valores de la libertad, la igualdad y la fraternidad.

Por su parte, el masón Alvaro Marcos aclaró que reivindican el "desagravio", no de una determinada obediencia masónica, sino de los masones en general, para que se reconozca que la masonería ha sido "injustamente masacrada ".

Asimismo, el también masón Ricardo Aldao dijo que, en contra de los que popularmete se piensa, los masones son gente normal, "no somos especiales, sino gente que tratamos de perfeccionarnos que tenemos unos ideales y una máximas", apostilló. Añadió que la masonería "no tiene nada de secreta", sino "discreta".