No se trata de una dotación destinada a la protección de dirigentes y cargos públicos, que corre por cuenta de los gobiernos autónomo y central, sino que se destinará a arreglar los desperfectos o destrucción de viviendas, negocios, sedes o bienes de particulares.

El PSOE argumenta que la fuerte deuda que arrastra le impide hacer frente a esos gastos y sugiere un aumento de un 40 por ciento en ladotación a los partidos, que permanece congelada desde 1997, en 11.231 millones, lo que supondría que se podrían repartir entre todos un aumento de 4.500 millones más.

Los socialistas vascos pretenden mejorar las medidas de seguridad en Casas del Pueblo con cámaras de vigilancia, puertas blindadas, salidas de emergencia y reforzar la seguridad en domicilios, empresas o vehículos de militantes del PSE.

El portavoz parlamentario del PSOE, Jesús Caldera, y el secretario general del PP, Javier Arenas tienen previsto reunirse la próxima semana para tratar de acercar posturas.