Explicó que el partido tiene que reflexionar "en todos los sentidos", dijo aludiendo también a su propia continuidad. "Es el partido el que tiene que decidir cuál es su dirección y si decide que sea secretario general, yo no voy a presentar unalista".

"Yo aceptaré la dirección que diga el partido. Sólo no aceptaría ser secretario general si no estuviera de acuerdo con las resoluciones. Eso ya ocurrió una vez", dijo en referencia al 28 Congreso, celebrado en 1979, en el que tras su renuncia a ser secretario general se formó una gestora.

En cuanto al tamaño de la Ejecutiva, señaló que una más reducida puede ser más efectiva, aunque señaló que esto no le parece un problema sustancial, sino una cuestión funcional importante. También señalóque puede caber la idea de formar un Consejo Político, que sería un organo intermedio entre la Ejecutiva y el Comité Federal.