El presidente del Gobierno, Felipe González, advirtió a los miembros del Comité Federal que "estamos a punto de cometer un rror", al iniciar el debate sobre el candidato del partido para las próximas elecciones, consciente de que el PSOE deseaba que repitiese, a pesar de sus argumentos para no hacerlo.

González, en una intervención de un cuarto de hora, se ciñó a las razones políticas, pero no a las personales, que le habían llevado a formular su deseo de no ser candidato y advirtió que lo que decía "es completamente en serio y lo he pensado mucho".

El líder socialista recordó que desde hace muchos años él había maniestado que está disponible para asumir responsabilidades y para cesar en esas responsabilidades, tras lo cual afirmó que el partido estaba a punto de cometer un error.

En su opinión, hay compañeros que también entienden los problemas del país y que podrían representar mejor los deseos de cambio en el partido y encarnar esa imagen para el año 2000.

Además, consideró que la sorpresa que representaría la elección de otro candidato sería positiva porque reflejaría una imagen de falta de apego al pode.

Recordó asimismo que en este momento no está en cuestión la secretaría general del PSOE, que se debatirá en otra ocasión, y que está dispuesto a defender el proyecto del partido desde otro puesto diferente al que ha ocupado en los últimos años.

Finalmente, aseguró que su postura no tiene nada que ver con la expectativa de voto que pueda generar en el electorado su figura y concluyó que, a pesar de todo, está "disponible".

Durante las dos horas que duró el debate, intervinieron 18 dirigente socialistas, de los que 11 defendieron la candidatura de González y 7 argumentaron en contra. Entre estos últimos se encontraban cinco miembros de Izquierda Socialista, corriente que ya había expresado su posición contraria a que el líder socialista encabezara por séptima vez las listas del partido. Los dos restantes fueron firmantes del documento de los 19.

UN RETROCESO, SEGUN IZQUIERDA SOCIALISTA

Se pronunciaron en contra Fernándo Morán, Juan Antonio Barrios, Ana Noguera, Antonio García Santesmass, Vicént Garcés, Ramón Vargas Machuca y Miguel Angel Pino.

Santesmases aseguró que poner a González al frente del PSOE en las próximas elecciones supondrá un retroceso y transmitirá al electorado la idea de que nada cambia en el Partido Socialista.

Según dijo, presentar a González es "malo para él, malo para el partido y malo para el país". Entre los favorables al 'no' se criticó con especial dureza el periodo de indecisión de González que ha impedido realizar un auténtico debate entre los militntes para decidir quién podría encabezar las listas del PSOE.

A favor estuvieron Francisco Vazquez, Luis Yañez, Jordi Solé Tura, Antonio Miralles, Jose Borrell, Juán Colino, Jaime Lissavetzky, María Antonia Martínez, Fernándo Serrano, Higinio Clotas y Juan Antonio Hernández Moltó.

El alcalde de La Coruña, Francisco Vázquez, defendió que González es el mejor candidato del PSOE y aseguró que "sería ilógico elegir a otro candidato a estas alturas y difícilmente explicable".

La votación sobre lacandidatura de González fue secreta y se desarrolló durante el curso del debate sobre el informe político.