"No estamos en una etapa precongresual ni congresual" y, por tanto, suscitar ahora esta controversia sólo sirve para dar bazas al Partio Popular. Este fue el análisis que hicieron la mayoría de dirigentes en la reunión y que resumió en rueda de prensa el secretario de Organización, Cipriá Ciscar.

Según el responsable de oreganización, la postura de todos los presentes fue "muy constructiva" a la hora de pronunciarse sobre este asunto, incluido el presidente extremeño, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, del que dijo que ya ha "matizado" sus primeras palabras de días atrás, en las que defendió la conveniencia de que toda la Ejecutiva sea reevada en el congreso como respuesta fulminante a los casos de corrupción que han salpicado al partido.

Ciscar dijo que Felipe González se pronunció en la reunión a favor de abrir un "proceso de renovación" en el partido, pero "cuando corresponda" en la cita congresual y manteniendo vigentes los plazos previstos.

Cuando se le preguntó a Ciscar si González puso su cargo a disposición o algún dirigente lo demandó en la reunión, dijo que no era el momento de hablar de esta cuestión y que el debate haía ido "por otros términos".

La consigna de la dirección del PSOE ahora está nítida, según Ciscar: actuar con firmeza contra los nuevos escándalos que puedan saltar y enterrar un debate de renovación que el PP está interesado en alimentar dentro de su estrategia de que los socialistas no le hagan oposición.

Prueba de ello es que Ciscar empezó la rueda de prensa sin hacer sin ninguna alusión a la discusión sobre la situación interna del partido y atacando desde el primer momento al PP.

"El seor Aznar y el PP tienen la tentación absolutista de querer un gobierno en España sin oposición, porque están inmersos en una estrategia de querer una oposición distanciada de los ciudadanos", afirmó Ciscar.

MANIPULACION

Aseguró que de las cinco horas de reunión, la mayor parte la dedicaron a analizar la política económica del Ejecutivo, y sólo destinaron poco más de una hora a hablar de la renovación en el partido.

Ciscar reiteró la tesis de la dirección socialista de que el PP está "repartiend el Estado y distribuyendo el botín a sus apoyos económicos".

En su opinión, el PP no está dispuesto a pararse en nada y por eso ha entrado en una clara "manipulación" de los medios públicos, sobre todo citó en Televisión Española y Radio Nacional, "con una política de comunicación dirigida por el señor Aznar y el señor Rodríguez que no atiende a los intereses generales de España, con purgas internas y subiendo el sueldo más del doble a las personas que han situado al frente".

Al ser preguntado s la Ejecutiva había abordado el tema del partido en Andalucía tras las denuncias de Jesús Gil, señaló que la dirección en aquella federación ha adoptado ya unas medidas cautelares, mientras que el PP lleva siete meses sin resolver su conflicto en Baleares por imputaciones similares de corrupción.

Ciscar citó recientes declaraciones del ministro Mariano Rajoy y del coordinador del PP, Angel Acebes, en las que minimizaron los escándalos de corrupción de su partido, llamándolos "anomalías", mientras exagran los casos que afectan a los socialistas.

Al margen de lo que intente el PP, el secretario de Organización socialista advirtió que su partido seguirá "pisando los talones" al Gobierno de Aznar y haciendole una oposición firme y fuerte.