Así lo confirmaron a Servimedia fuentes socialistas, que precisaron que el PSOE ha retirado la enmienda que, a su juicio, “iba a hacer posible perseguir el proxenetismo y la tercería locativa” ante la “irresponsabilidad” del resto de grupos de la Cámara Baja, que, recordaron, “han amenazado con votar en contra de la ley contra la violencia sexual si se mantenía la enmienda”.

Tras puntualizar que el PSOE “siempre” comprometió su voto afirmativo a la ley “tanto si salía la enmienda, como si era rechazada”, las mismas fuentes lamentaron que, a pesar de ello, “diferentes grupos parlamentarios han amenazado con votar en contra de la ley si la enmienda salía adelante”.

“La actitud improductiva y los vetos cruzados de los grupos solo logra postergar la aprobación de este texto”, añadieron, para advertir de que, además, “dejan muy dañada una ley que aborda el consentimiento sexual, pero no aplicará ninguna medida para impedir una de las peores formas de violencia contra las mujeres”, como es la prostitución.

Para el PSOE, esta actividad es “una forma de violencia sexual contra las mujeres”, por lo que las citadas fuentes consideraron que la ley que abordará la violencia sexual y que “pretende garantizar la libertad sexual” debería tipificar penalmente el proxenetismo y la tercería locativa “de forma que enfrentase la impunidad que existe ante el lucro de la prostitución de mujeres”.

Por esta razón, en lo que defendieron como “un ejercicio de responsabilidad”, los socialistas retiraron su enmienda ante la “posibilidad” de que la ley “retrasara su tramitación” y, “cumpliendo” con sus compromisos políticos, registrarán este jueves una proposición de ley que, según anunciaron, “abordará una redacción efectiva del proxenetismo y de la tercería locativa”.