Según Almunia, este desgaste está motivando la "pérdida de confianza" de sus electores e incluso de sus socios de gobierno, que al principio fueron "capaces de apoyarle en las duras y en las maduras".

A su juicio, "la sociedad española empieza a señalar con el dedo al PP por la política de regresión social que está poniendo en práctica", cuyo máximo exponente es el "medicamentazo". En este sentido, advirtió sobre la tentación de Gobierno de intentar un recorte de las prestaciones sociales tomando como pretexto la incorporación de España al euro.

Citó también como un elemento más de desconfianza de los ciudadanos hacia el Gobierno del PP el proyecto de reforma del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), del que los socialistas y "una buena parte de los ciudadanos" sospechan que será "regresiva" y recortará los ingresos de la Hacienda Pública, con el consiguiente recorte posterior del gasto social.

Por tod ello, el secretario general el PSOE considera que el Gobierno del PP está dando su verdadera faz de "derecha reaccionaria", que ha intentado ocultar tras una cortina de centrismo en la primera parte de la legislatura. "Esta es la derecha en lo político, en lo social y en lo económico", sentenció.

Frente a este panorama del PP, el PSOE ofrece, según Almunia, un proyecto "progresista" y "creíble", reforzado por una actitud "optimista" de los militantes socialistas, volcados en el trabajo y con un partio "cohesionado".

INTERVENCION DE GONZALEZ

Tras la intervención del secretario general, habló el ex presidente Felipe González, quien denunció que el PP "no tiene proyecto para España", razón por la que "demuestra debilidades frente a sus socios" nacionalistas, y una incapacidad manifiesta "para afrontar los grandes problemas de nuestro país".

González también se refirió a las discrepancias surgidas con el Gobierno en torno a la lucha antiterrorista y a lo que consideró "deficiencias" de la estrtegia contra ETA.

Otros miembros del Comité Federal atribuyeron a González afirmaciones de que la política antiterrorista va mal porque el PP está siendo víctima de la política que hizo en la oposición; que la justicia está sufriendo un deterioro y el Gobierno no hace nada por remediarlo y que el Ejecutivo está reventando la estructura del Estado.