El líder del PSOE-A y senador, Juan Espadas, fue el encargado de marcar la posición del PSOE durante el debate en el Senado en la Comisión General de las Comunidades Autónomas en la que hubo un “paseíllo”, a su juicio, de presidentes autonómicos populares acusando a Sánchez y a los socialistas de “romper España”.

“El fondo de la cuestión” no es la igualdad ni la Constitución ni España, como dijo Espadas que son los argumentos del PP para convocar esta comisión, sino que “la cuestión es evitar un Gobierno progresista frente a la extrema derecha que ustedes dan alas”.

Por ello, Espadas sostuvo que “no es tiempo de cavar trincheras, sino de tender puentes y construir convivencia”, y afirmó que “el PSOE ha sido, es y será el garante de la unidad, pluralidad y la constitucionalidad del modelo territorial en España” porque se trata del “Partido Socialista Obrero Español”, remarcando la palabra ‘español’.

Espadas tenía hoy todo el foco de la respuesta del PSOE al “teatrillo”, como definían desde Ferraz, del PP en el Senado y fiel a la posición acordada con la dirección federal en ningún momento mencionó la palabra 'amnistía' ni ofreció detalle alguno sobre la situación de las negociaciones para la investidura de Sánchez.

De hecho, respondió a las acusaciones de falta de transparencia en las negociaciones de Sánchez con los partidos independentistas para su investidura tirando de ironía al preguntar si “las reuniones por el pacto del Majestic se retransmitían en TV3”, aludiendo al acuerdo PP y CiU de 1996 que permitió el primer Gobierno de José María Aznar.

En la dirección socialista admitían que el discurso del presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonès, estuvo en la línea de lo “esperado” y con las “posiciones de siempre”, e incluso algún senador socialista presente en la Comisión sostuvo que fue “comedido” tras lo que fueron luego los presidentes autonómicos que hablaron en el “mitin del PP”.

En el PSOE consideran, según fuentes de la dirección, que el PP ha quedado más retratado aun en esta Comisión y que incluso esta “performance de la calle Génova” les puede ir bien para la investidura en la medida en que los independentistas ven lo que tendrían enfrente si no hay un Gobierno del PSOE.

Espadas aprovechó que el único presidente autonómico presente era el de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, para abordar varias cuestiones autonómicas y afirmar que la situación de la comunidad mejora cuando el PSOE está al frente del Ejecutivo central.

“La mejor garantía” para la igualdad es un Gobierno de Sánchez, resumió Espadas, después de acusar a los presidentes autonómicos populares y a sus políticas de ser el “peor enemigo para la igualdad” en España.

“Menos confrontaciones partidistas, menos dinero en propaganda institucional, más capacidad y ejercicio de las competencias con los fondos del Estado”, espetó Espadas a Moreno, sentado solo en la bancada reservada a los presidentes autonómicos.

Así las cosas, Espadas acusó a los populares de falta de respeto institucional y de usar el Senado para cuestiones partidistas, por lo que les pidió que dejen la “política de confrontación, de frentismo” porque se está “hablando de buenos y malos”, se alimenta a los que no quieren formar parte de proyecto común” y evoca "una concepción de España tan pequeña que solo caben ustedes y la ultraderecha”.