Durante la sesión de control al Gobierno, el ministro de Medio Ambiente se defendió de las acusaciones del "caso Formentera" imputando al socialista Moragues la "dilapidación" de cincuenta millones depesetas mientras presidía el Consell Insular de Menorca.

Los intentos del Grupo Socialista por defender a su diputado se zanjaron con la invitación de la presidenta de la Cámara al ministro para que rectificara. Sin embargo, Matas ratificó sus acusaciones.

Ante esta actitud de Rudi, los grupos de la oposición solicitaron una reunión extraordinaria de la Junta de Portavoces, en la que reivindicaron el derecho de Moragues a defenderse públicamente en la próxima sesión plenaria.

La negativa de a Junta de Portavoces a conceder este derecho, con los votos del PP, provocó una serie concatenada de comparecencias de los representantes de los distintos grupos ante los medios de comunicación.

La secretaria del Grupo Socialista, María Teresa Fernández de la Vega, juzgó "inadmisible" que se niegue a un diputado el derecho a defenderse de estas graves imputaciones, y concluyó que la Presidencia de la Cámara se comporta "como la Delegación del Gobierno, o de la calle Génova".

No obstante, recordóque los hechos "son tozudos" y que, a pesar de que los intentos del diputado por pedir la palabra no constan en acta porque no llegó a obtenerla, el vídeo de la sesión puede demostrar que sí lo hizo.

PP: RUDI, "IMPECABLE"

El portavoz del Grupo Popular, Luis de Grandes, sostuvo que ni él mismo ni otros diputados y, por tanto, quizá tampoco la presidenta, vieron a Moragues solicitar la réplica, y argumentó que Rudi amparó al Grupo Socialista al invitar al ministro a rectificar. Otra cosa es que éste n lo hiciera.

De Grandes reconoció que las palabras de Matas fueron "contundentes y duras", pero precisó que también Moragues protagonizó un "previo acoso de imputaciones delictivas" al ministro. Ante todo ello, consideró que la actuación de Rudi fue "impecable".

En su opinión, las denuncias del Grupo Socialista obedecen solo a un intento de "socavar" la imagen de Luisa Fernanda Rudi con un estilo de oposición "ramplón".

También el vicepresidente primero del Congreso, el popular Francisco Cams, reprochó a los socialistas sus intentos de trasladar a la opinión pública una sensación de actuación "arbitraria" de Rudi y una imagen "irreal" de lo que sucede en el Parlamento.