El sector el Metal agrupa a 60.000 empresas que producen el 20 por ciento del PIB español en industrias del acero, electrónica, automoción, construcción naval y bienes de equipo, entre otras.

Los fabricantes de bienes de consumo duradero acusaron el empeoramiento de las expectativas de consumidores y la reducción de empleo, que se tradujo en una importante baja en la demanda de automóviles y viviendas, y que arrastró también su caída a la compra de electrodomésticos.

En las cuentas de resultados de las empesas, todo ello se tradujo en una disminución de los excedentes brutos. Según Confemetal, los precios de las industrias del sector aumentaron un 3,2 por ciento, mientras que los costes energéticos crecían un 7,5 por cien, los costes laborales un 9,6; y los financieros, un 9,2.

La mala situación interior obligó a las empresas a buscar nuevos mercados en el exterior, lo que dio lugar a un déficit comercial de 1,48 billones de pesetas, con un descenso del 8,7 por cien respecto a 1990. Las exportaciones acendieron a 3.196.656 millones de pesetas y las importaciones se elevaron a 4.685.967.

Entre los subsectores del Metal, La producción de bienes de equipo ascendió a 2,6 billones de pesetas, lo que supuso un aumento del 10 por ciento, y las exportaciones sumaron 900.000 millones. No obstante, el nivel de autoabastecimiento se sitúa todavía en el 43,2 por cien, un punto más que en 1990.

La facturación de la industria electrónica fue de 1,5 billones de pesetas, el 3 por ciento del PIB, lo que represnta la primera caída de la cuota nacional de producción de este subsector desde 1970.

España se mantuvo como séptimo mercado electrónico mundial y quinto europeo, pero el empleo se redujo un 11 por ciento, hasta situarse en 53.012 trabajadores. Confemetal vaticina que este año habrá una reducción adicional del 20 por cien.

Por lo que se refiere al subsector de automoción, su facturación ascendió a 2,25 billones de pesetas, con un descenso del 5 por cien. Peor evolucionó la construcción naval, queregistró en 1991 su nivel más bajo de los últimos años, al totalizar 164.000 toneladas, un 62 por cien menos que el ejercicio precedente.