Esta es la subida más significativa que se produce en España en los cuatro últimos años, especialmente después del bajón sufrido por la industria del libro en 1989, en que hubo un retroceso en la evolución del mercado.

También se ha registrado un aumento del orden del 9 por ciento en el núero de empresas editoras españolas, que ya son 1.829 en el año 1990, frente a las 1.678 del año anterior.

La distribución geográfica apenas ha variado en este periodo, por lo que Madrid sigue a la cabeza de las provincias editoras de libros, con un total de 16.000 títulos, mientras que Barcelona, su inmediata seguidora, registró 15.118 títulos. Entre ambas provincias aportan el 74 por ciento de los títulos inscritos.

Los libros de etnología, de ciencias políticas y de geografía y viajes aumentaro durante el año su nivel de oferta por encima del 20 por ciento, mientras que las areas temáticas de arte y ciencia militar, economía doméstica y matemáticas fueron las únicas que descendieron en esa escala.

Según los idiomas del Estado, los mayores incrementos se registraron en las ediciones en euskera, con una tasa de crecimientos del 31 por ciento con respecto a 1989.

Los libros publicados en gallego aumentaron en un 18 por ciento, en catalán un 12 por ciento y la edición en castellano, que suone el 86 por ciento del total, creció en un 8 por ciento.