José Luis Calvo, vicepresidente de Prodeni, ha exigido al Gobierno que impulse las reformas y medidas necesarias para que individuos como el pederasta Álvaro Iglesias, más conocido como "Nanysex", "cuando estén en la calle estén controlados".

Y es que, argumentó Calvo, los pederastas pueden comportarse "como bellas personas" en prisión, pero reincidir cuando están en libertad, ya sea total o parcial, independientemente del número de años que pasen en la cárcel.

Por eso, en su opinión, que "Nanysex" haya sido condenado a menos años de los que pedían el fiscal y los familiares de sus víctimas no es tan relevante, ya que, en cualquier caso, la condena excede de los 30 años que como máximo puede pasar un recluso en la cárcel según la legislación española.

Lo verdaderamente importante para Prodeni es que el Gobierno garantice a la sociedad que personas como "Nanysex" no volverán a tener contacto con niños cuando estén en libertad. Para ello, dijo Calvo a Servimedia, han de tomarse medidas que impidan que trabajen con pequeños o tengan contacto con ellos mediante acciones como voluntariado o de cualquier otro tipo.

Aunque a "Nanysex" se le ha prohibido acercarse y comunicarse con sus víctimas durante un periodo de diez años, una vez sea excarcelado, Prodeni considera que esa prohibición ha de ser "de por vida".

"Nanysex" ha sido condenado por la Audiencia Provincial de Madrid a un total de 58 años de prisión por cinco delitos de abusos sexuales y seis de corrupción de menores, cometidos contra cinco niños entre 2002 y 2004 en las localidades de Collado Villalba (Madrid) y Lo Pagán (Murcia).

Los familiares de los menores y diversas personas y entidades relacionadas con la defensa de los menores han expresado su disconformidad con la sentencia, por considerarla demasiado leve.