Rajoy pudo comprobar en qué punto se encuentran las relaciones con el país vecino en este asunto durante dos reuniones con el presidente de la República, Jacques Chirac,el primer ministro francés, Jean Pierre Raffarin.

El líder de los populares dijo haberse entendido con ambos dirigentes sobre el accidente del Prestige, a pesar de que la prensa francesa desvela hoy un informe encargado por el Gobierno galo, en el que se culpa al Ejecutivo español del vertido de petróleo.

Destacó los acuerdos alcanzados en los últimos meses para alejar los barcos peligrosos a 200 millas de la costa y la colaboración entre los dos países, tanto en el reparto de los fondos del FIDC como en la nueva legislación de la Unión Europea.

Rajoy mostró su deseo de mejorar la organización marítima internacional para garantizar una mejor seguridad en el transporte de mercancías peligrosas, cuestión que abordó especialmente con Raffarin.

Por último, calificó de "sorprendente" el informe de la Universidad de La Coruña que advertía del riesgo de contaminación de la cadena alimentaria por el accidente del Prestige y celebró que la Agencia de Seguridad Alimentaria lo haya desmentido rápiamente.