Así lo apuntó durante su intervención en el desayuno informativo Executive Fórum después de que Sánchez pusiese a algunos ministros a liderar las federaciones regionales, como Diana Morant en la Comunidad Valencia, Pilar Alegría en Aragón, Óscar López en la Comunidad de Madrid o María Jesús Montero en Andalucía.

La presidenta de la FEMP y alcaldesa de Jerez de la Frontera remarcó que ella para su Gobierno local siempre dice que no quiere un gobierno de tristes, pero lamentó que el de España “es un Gobierno de débiles”.

García-Pelayo consideró que dicha decisión de colocar a ministros en diferentes comunidades autónomas representa que “no me fío de nadie, salvo el que está a mi derecha en el Consejo de Ministros”. Por ello, “demuestra debilidad, demuestra miedo y preocupación, demuestra que el PSOE no tiene banquillo y que Sánchez está por encima de todo y no respeta a su propia militancia”.

MONTERO EN ANDALUCÍA

Preguntada concretamente por el posible papel de Montero en Andalucía, la presidenta de la FEMP recordó que la actual ministra de Hacienda ya fue consejera de Sanidad y de Hacienda de la Junta de Andalucía.

García-Pelayo destacó que ahora en Andalucía “hay otras políticas, otras maneras de gestionar” y consideró que los andaluces “están contentos con el Gobierno de Juanma Moreno”, pero “no solamente por la gestión que está haciendo, sino también con las formas y el modo”.

Por ello, aseguró que “ha llegado para quedarse en Andalucía otro tipo de política que está gustando a los andaluces”.

Por su parte, entendió que María Jesús Montero sería “volver a la política gastada, quemada y antigua, a la que ya los andaluces le dijeron claramente que no”. Además, “si encima nos riñe, que echa unas broncas que no veas, eso a los andaluces no les gusta”, bromeó, por lo que “quizá haya sido hasta una buena noticia”, concluyó.