En una entrevista en TVE recogida por Servimedia, Bravo trató de dar la vuelta a la focalización sobre su partido derivada de que se publicara un preacuerdo de la anterior dirección del PP con el Gobierno para renovar el Tribunal Constitucional, firmado por el ex secretario general de la formación Teodoro García Egea.

Así del documento de condiciones presentado por el PP en julio, enumeró el plazo mínimo de cinco años para pasar del Gobierno a la Fiscalía General o presidencias de sala de altos tribunales, el de 25 que debería estar un juez instruyendo antes de pasar al Supremo, que el proceso de elección de vocales se debata en las Cortes, que el CGPJ prepare una proposición de ley para mejorar el sistema de renovación y que se respete el resultado de las oposiciones.

Antes, insistió en la versión del PP de que su presidente, Alberto Núñez Feijóo, “no tenía ese documento”; de que “en ningún caso el presidente Sánchez habló de ningún documento” en su reunión con él, y de que “en el traspaso de poderes no se le había facilitado” por parte de la dirección saliente encabezada por Pablo Casado y García Egea. No obstante, matizó: “No sé si alguien de la dirección lo recibió”.

El vicesecretario de Institucional del partido, Esteban González Pons, ya atestiguó la semana pasada en otra entrevista que, en su primera reunión con el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, éste le dijo que “tenía documentos pactados en secreto que no eran conocidos y quería ponerlos encima de la mesa”, uno de ellos el de García Egea, a lo cual él habría contestado que el PP “no admite documentos secretos” porque “la negociación debe ser pública” y por tanto “empezó de cero”.