Molina, que aboga por la declaración de Cabañeros como zona de especial conservación, subrayó que un parque nacional prohibe "los usos agrícolas y ganaderos tradicionales, con lo que no se mejora el medio ambiente y se empobrece a las gentes que vieven de ellos".

El dirgente popular, que explicó las alegaciones que su partido ha presentado al plan de ordenacion de los recursos naturales del futuro parque nacional, aseguró que este paraje "acabará convirtiéndose en una finca particular para los gobernantes y sus amiguetes".

Asimimso, considera que esta figura de protección resta competencias a Castilla-La Mancha, que tiene una mayor coste económico y que perjudica a los habitantes de la zona que viven de los usos tradicionales.

"Es impresentable que desde Castila-La Mancha se quieran traspasar las competencias sobre Cabañeros al Estado, cuando estamos en un proceso en el que las comunidades autónomas están asumiendo nuevas competencias", explicó.

Asimismo, afirmó que el dinero que podría venir de la Unión Europea para esta zona iría en su mayor parte destinado a pagar las expropiaciones de los terrenos incluidos en el futuro parque nacional de Cabañeros.

Molina advirtió que existen recursos de inconstitucionalidad de varias comunidades autónomas contra a ley que permite la creación de parques nacionales y que si los tribunales fallaran contra esa norma no serviría de nada la declaración de Cabañeros.