Según informaron, tanto la deducción del mínimo personalfamiliar como la que corresponde por la obtención de rentas del trabajo serán objeto de nuevas modificaciones para beneficiar a un mayor número de personas discapacitadas.

Homs explicó que la idea no es tanto la de elevar dichas deducciones, que ya han sido objeto de mejora en el trámite parlamentario, como de hacer que sea un mayor número de personas el que pueda beneficiarse de este mejor trato fiscal.

Frente a la redacción actual del mínimo vital, que establece una cuantía de 850.000 para tods los discapacitados ó 1.150.000 para los de grado alto, Homs explicó que el objetivo de su grupo es hacer que puedan acogerse a la mayor de estas cantidades todos las personas con una discapcidad superior al 60%, es decir, con un considerable grado de dependencia.

Respecto a las rentas del trabajo percibidas por discapacitados, el representante de los nacionalistas catalanes explicó que la pretensión de CiU es que el incremento en la deducción del 80% para este tipo de personas se haga a partir de la 675.000 pesetas que se les ha reconocido ya en la reforma, y no de las 350.000 que se aplican con carácter general a todos los contribuyentes.

Por su parte, Martínez Pujalte expresó la satisfacción del PP por contar con la mayoría parlamentaria suficiente para asegurar ya a los ciudadanos que la reforma del impuesto entrará en vigor junto con el euro, es decir, el 1 de enero de 1999.

El diputado del PP dijo que su grupo ha buscado el máximo consenso posible, lo que le llevará a aceptar enmiendasde todos los partidos de la Cámara, incluido el PDOE, aunque en este caso se trate sólo de unas modificaciones técnicas de escasa trascendencia.