Según informó hoy la Jefatura Superior de Policía de Madrid, los hechos tuvieron lugar ayer, minutos después de las cinco de la tarde, cuando una llamada al 091 alertó de que una persona quería quitarse la vida precipitándose al vacío por el balcón de su vivienda en una octava planta.

Al lugar se dirigieron rápidamente una patrulla del distrito de Latina junto con dos indicativos "Alazanes" y ya en el domicilio, los policías llamaron a la puerta de la vivienda de la persona que pretendía matarse.

Al no obtener respuesta, accedieron a la casa contigua con el consentimiento de su titular, quien les había manifestado que su piso y el de la persona que quería suicidarse estaban comunicados por el balcón.

Una vez en la terraza, consiguieron hablar con la mujer que pretendía quitarse la vida, que se encontraba muy nerviosa y repetía el ademán de lanzarse al vacío, al tiempo que sacaba una pierna fuera de la barandilla. Ante esta situación, los policías intentaron tranquilizarla, ya que mostraba un evidente estado de ansiedad.

La mujer, cada vez más nerviosa, sacó todo el cuerpo por la parte exterior de la barandilla y resbaló, si bien logró agarrarse a unos barrotes y quedó suspendida en el vacío. Debido al inminente peligro que corría, uno de los agentes consiguió franquear rápidamente el cristal que separaba ambos balcones y sujetar a la suicida, sacando medio cuerpo por la barandilla.

De inmediato, el resto de los policías accedieron a la terraza y, en una actuación conjunta, la subieron con grandes esfuerzos hasta lograr introducirla de nuevo en la vivienda. La joven fue trasladada posteriormente al Hospital Clínico San Carlos por psiquiatras del Samur.

El policía que intervino en primer lugar resultó con lesiones en la zona lumbar debido al esfuerzo realizado en el transcurso de la intervención y actualmente se encuentra de baja.