La policía confiscó más de 18 kilos de hachís, 40 dosis de heroína, 150 dosis de cocaína, 90 pastillas de éxtasis y cinco sellos de LSD, así como tarjetas de crédito y cuatro robados.

En la operación participaron decenas de agentes en la desarticulación de pequeñas redes de narcotráfico que operaban en varias poblaciones del área metropolitana y de la provincia de Barcelona.

Las detenciones se produjeronen Barcelona capital, Sant Adriá del Besós, Mataró, Viladecans, Castelldefels, Cornellá, Esplugues, El Prat de Llobregat, Sant Boi, Sant Feliu y L'Hospitalet. El operativo policial se efectuó en locales públicos o en los llamados 'puntos negros' de la calle.

Además de los 66 detenidos, la mayoría de los cuales pasaron a disposición judicial, fueron identificadas cerca de 700 personas sospechosas de traficar con droga, algunas de las cuales llevaban encima pequeñas cantidades de sustancias estupefacienes.