Después de sonar con fuerza como aspirante en los últimos años, Gamoneda figuraba esta edición en las quinielas como candidato favorito para obtener el "Nobel de la literatura en español".

Sin embargo, ayer mismo, en la presentación de su antología poética "Sílabas negras", se mostró escéptico y dijo con ironía: "Tengo afianzada mi condición de finalista y eso es lo que prevalecerá".

El ganador del Cervantes de este año volverá a vincularse este año con la política. Ocurrió en 2002 cuando se lo llevó José Jiménez Lozano, amigo de José María Aznar, y ocurrirá este año con Gamoneda, ya que es amigo de José Luis Rodríguez Zapatero. Gamoneda reside desde los tres años en León, de donde es natural el presidente del Gobierno, que recientemente escogió un poemario de Gamoneda para regalo de Navidad.

Esta tarde, la reina Sofía tiene previsto entregar a Gamoneda el premio de poesía iberoamericana que lleva su nombre.