Piqué, en su intervención en el Pleno del Congreso para valorar la evolución del proceso de paz, se refirió a los pactos y acuerdos alcanzados ultimamente por el Partido Nacionalista Vasco(PNV) y Euskal Alkartasuna (EA) con Euskal Herritarrok (EH) como decisiones que no contribuyen a la pacificación.

En primer lugar, el portavoz citó el acuerdo de legislatura de los partidos nacionalistas, del que dijo que es "un gran peligro" y "un paso atrás", porque no se puede gobernar el País Vasco desde una "visión reduccionista".

Asimismo, incluyó, entre estas actitudes "poco democráticas", que PNV y EA no censurasen la inclusión de presos de ETA en las listas electorales de EH; la inclusió de Josu Ternera en la Comisión de Derechos Humanos del Parlamento vasco; o la petición de mediadores internacionales.

El portavoz, que respondía a una interpelación del PNV y EA sobre el cumplimiento de una moción sobre el proceso de paz aprobada en noviembre de 1998, dijo que el Ejecutivo entiende que ha cumplido el contenido de la citada iniciativa, referida al cumplimiento de la política penitenciaria, a la atención a las víctimas y al consenso político.

Sobre la política penitenciaria, Piquédijo que es "dinámica y flexible" respecto a los presos de ETA, y que el que su amplitud sea mayor depende de la voluntad de los propios terroristas de abandonar la violencia.

Asimismo, el portavoz aseguró que se está cumpliendo el segundo punto de la moción referido a la atención a las víctimas, ya que el Gobierno ha elaborado una proposición de ley que estudian en este momento los partidos, y que prevé indemnizaciones por valor de 44.000 millones de pesetas.

Piqué consideró que el Ejecutivo tamién ha defendido el consenso, y destacó que el Foro de Ajuria Enea sigue siendo un "foro válido que no podemos desaprovechar", pero atribuyó la responsabilidad de posibles desencuentros en las formaciones nacionalistas.

INMOVILISMO

Por su parte, los portavoces del PNV, Iñaki Anasagasti, y de EA, Begoña Lasagabáster, reprocharon al Gobierno su "inmovilismo" y que no haya dado los pasos necesarios en la consecución de la paz después de la tregua de ETA.

Así, Anasagasti dijo que en la política pentenciaria sólo había habido "imposición" y que el Gobierno ha desatendido la petición de mayor flexibilidad que le han hecho distintos sectores sociales y políticos del País Vasco.

"No ha habido consenso, no ha habido dinamismo", dijo el diputado peneuvista, quien reprochó también a Piqué sus referencias críticas a los nacionalistas, de las que dijo que "nos irritan profundamente". Pidió, por este motivo, un "desarme verbal" después de que haya cesado la violencia.

A su vez, Begoña Lasagabáster dfendió el pacto de legislatura de los nacionalistas vascos, y dijo que una mayoría de los vascos lo estiman positivo. La diputada consideró que el proceso de paz está "en el buen camino", pero instó al Gobierno que pase de las palabras a los hechos.

La diputada del PSOE María Teresa Fernández de la Vega aseguró que el debate en el Congreso había puesto de manifesto la postura de los "constitucionalistas" (PP y PSOE) frente a los nacionalistas, y reclamó al Gobierno que no paralice las políticas de reiserción.