Aznar dijo en en el Palacio de la Mocloa que el Ejecutivo es "respetuoso" con las decisiones de la Justicia y que "lo ha sido desde el primer momento", al tiempo que añadió que "su actuación ha sido ésa, es ésa y seguirá siendo la misma".

Se refirió a que en Chile hay varios procesos abiertos contra el ex ictador Augusto Pinochet y a que las autoridades de este país han manifestado que no interferirán en los mísmos, y dijo, al respecto, que en España "pasa lo mismo".

En referencia a las críticas que el Gobierno español ha recibido del chileno por no aceptar un arbitraje internacional, el presidente declaró que no entrará a polemizar, porque quiere que las relaciones bilaterales no se vean afectadas por este asunto.

"Yo podía declarar muchísimas cosas", aseguró, "hacer muchísimos comentarios sobre nas y otras cosas, pero no lo voy a hacer por puro sentido de la responsabilidad".

En este sentido, concluyó que no dirá nada que pueda interpretarse como que está "poniendo más madera" o que no contribuye a las buenas relaciones entre los dos países, "al margen de cualquier episodio singular".