En declaraciones a Servimedia, el responsable de comunicación de CEA, Antonio Lucas, puntualizó que la DGT está haciendo cosas buenas para reducir las muertes en carretera, en donde fallecieron 4.280 personas durante 1999, por lo que "la tasa de siniestralidad no sólo es cosa de Tráfico, sino también de los propios conductores, que deberán de poner su granito de arena para dsminuir esta tasa".

A su juicio, "se deberían de hacer campañas destinadas principalmente a la educación vial de los conductores, sobre todo para que éstos disminuyan el consumo de alcohol cuando tienen que conducir".

Además, otra de las propuestas que formuló el responsable de comunicación del CEA fue que el Ministerio del Interior anunciase en las botellas de bebidas alcohólicas mensajes alertando del peligro de estas a la hora de coger un coche, tal y como aparece en las cajetillas de tabaco e las que se alerta de las enfermedades que se pueden padecer.

Asimismo, se mostró contrario a que se eleve la cuantía de las multas como medida para frenar los accidentes por carretera en favor de mayor educación vial.

Sin embargo, se mostró contrario a elevar la cuantía de las multas de tráfico y propuso que las botellas de bebidas alcohólicas incluyan mensajes de advertencia similares a los de las cajetillas de tabaco, que llevan obligatoriamente la siguiente leyenda: "las autoridades sanitaria advierten que el tabaco perjudica seriamente la salud y que fumar durante el embarazo daña al futuro hijo".

Por su parte, CEA piensa organizar otra vez su "Semana contra el alcohol en la conducción", jornada que se realizó por primera vez el pasado año y en la que contaron con la colaboración de 30 organizaciones y entidades gubernamentales, como la propia DGT.