Saura considera que lo hechos por los que se abrió el expediente no constituyen alteración del orden público y por tanto no deben ser objeto de una sanción administrativa con multa de entre 50.000 y 1.000.000 de pesetas.

Los hechos a los que se refiere la sanción ocurrieron el pasado 27 de mayo de 2001 en el Teatro Principal de Alicante, durante un acto convocado por la COEPA y la Cámara de Comercio en apoyo al Plan Hidrológic Nacional.

El acto congregó un número de asistentes superior a la capacidad que tiene el teatro, por lo que se habilitó una pantalla gigante en el exterior para que alrededor de unas 500 personas pudieran seguir los actos.

Precisamente, en el exterior del teatro, un grupo de 10 ecologistas desplegaron una pancarta con la inscripción "No al trasvase del río Ebro. Alto a la especulación urbanística", firmada por Ecologistes en Acció del País Valenciá, junto a la pantalla.

Según explica Saura, a pancarta no obstaculizó en ningún momento la visión de la pantalla y los que la portaban iban con la boca cerrada con esparadrapo y no emitieron sonido alguno. Por lo que su protesta tuvo un carácter totalmente pacífico.

Unos 40 minutos después del despliegue de la pancarta, varias personas se acercaron al grupo y se la arrebataron de la manos con actitudes violentas, empujones y zarandeos. Incluso se lanzó alguna botella de agua que alcanzó a uno de los ecologistas.

Poco después intervino la plicía, que ordenó a los ecologistas que abandonaran el lugar, sin identificarse en ningún momento pese a que los manifestantes se lo solicitaron.

Saura entiende que los hechos no supusieron interrupción alguna del acto y que no pueden ser tildados como alteración del orden público, por lo que entiende que el expediente debe ser archivado.