Este comportamiento positivo, que sirvió para frenar el Indice de Preios al Consumo (IPC) de junio, se ha debido fundamentalmente a la caída del dólar y de las cotizaciones internacionales de los productos.

No obstante, las críticas públicas que Becerril efectuó en mayo contra las "políticas comerciales" de las compañías surtieron efecto en junio y el precio medio de la gasolina sin plomo bajó en España 2,14 céntimos de euro por litro, frente a los 1,12 céntimos de la media aritmética del resto de los países de la UE.

La súper descendió en la península y Baleares ,07 céntimos en junio, frente a los 1,93 céntimos de la UE, y el gasóleo de automoción cayó 2,26 céntimos, mientras que en Europa sólo bajó 1,40 céntimos.

En definitiva, los precios medios de junio quedaron en 81,9 céntimos por litro para la gasolina sin plomo 95 (99 céntimos de media en la UE); en 87,9 céntimos para la súper (102,7 en la UE), y en 69 céntimos para el gasóleo (78,5 en Europa).

Preguntada sobre cuál es el nivel de precios óptimo para el Gobierno, Becerril señaló hoy que los operadres "han entendido que éste es un nivel de precio adecuado y suficiente para atender sus costes y, en cualquier caso, creo que no podemos hacer ningún pronunciamiento sobre cuál es el nivel óptimo".

Añadió que, "en ruedas de prensa anteriores hacía la matización de que entendíamos que no era de recibo, con la estructura del mercado español, que los precios estuvieran por encima de la media aritmética. Cuánto tienen que estar, en qué situación concreta tienen que estar, es una cuestión muy difícil de oinar", afirmó Becerril.