Según señalaron a Servimedia fuentes próximas a los asistentes a la reunión, el ministro grantizó que entre las 1.245 microfichas que Perote se llevó, sólo había una que hacía una mención de los Grupos Antiterroristas de Liberación, aunque sin mayor contenido específico.

Igualmente, el titular de Defensa admitió que el ex jefe de Operaciones del Cesid robó información sobre el rey Juan Carlos, y en concreto "cuatro documentos" que afectan al monarca, si bien todos ellos carecen de importancia.

El titular de Defensa, siempre según las citadas fuentes, explicó que Perote se apropió de dcumentación de gran valor relacionada con la estrategia seguida en la lucha contra el terrorismo.

Sobre la entrevista mantenida el pasado 23 de junio entre el presidente del Gobierno y el abogado Jesús Santaella, representante de Mario Conde y Juan Alberto Perote, el ministro de Defensa se limitó a señalar que tal encuentro era muy necesario, aunque sin apoyar su afirmación con más datos, según denunció la portavoz de Izquierda Unida, Rosa Aguilar.

Al término de la reunión, Suárez Pertierra compaeció ante los periodistas para explicar que en la sesión se abordaron dos puntos: el informe sobre las escuchas del Cesid y la información del Gobierno acerca del material sustraido por el coronel Perote.

El titular de Defensa señaló que en su comparecencia no se habló de ninguna conspiración contra el Gobierno y destacó que su intervención estuvo sujeta en todo momento al carácter secreto de este tipo de reuniones.

El ministro, que según alguno de los asistentes habló de los cerca de un millar d documentos robados por Perote, reconoció que parte de este material es "especialmente sensible" para la seguridad del Estado.

5 HORAS DE REUNION

Las casi cinco horas que Suárez Pertierra empleó en informar a los diputados que tienen acceso a materias clasificadas no convencieron a los grupos de oposición, que coincidieron en señalar que los datos aportados por el Gobierno fueron insuficientes.

El portavoz del PP, Rodrigo Rato, puso de relieve que la comparecencia de hoy fue "inútil" y que el mnistro insistió en que la documentación robada era de tal gravedad para la seguridad del Estado que este hecho ampararía cualquier actuación posterior del Ejecutivo.

Tras subrayar que es muy difícil aceptar explicaciones que se salen de "cualquier análisis lógico", Rato afirmó que no sabe que es más grave, si la sustracción de documentos del CESID o la negligencia del Gobierno para investigar los hechos y tomar medidas urgentes.

Rato dijo que reuniones como las de hoy forman parte de una estratega política y de comunicación, en la que el Gobierno trata de ocultar todo aquello que no le conviene para intentar resolver sus propios problemas.

Por su parte, la representante de IU, Rosa Aguilar, explicó que el Ejecutivo no dijo hoy toda la verdad y que su información podría servir para escribir una novela de ciencia ficción, que, a su juicio, conseguiría convertirse en un éxito de ventas.

INVENTO DEL GOBIERNO

"El Gobierno", añadió, "ha podido ser chantajeado, pero en ningún caso hay una conpiración contra el Estado. Esto es un invento del Gobierno para convertirse en víctima de una situación de la que no es víctima, sino protagonista".

Aguilar se mostró especialmente contrariada por el hecho de que el Gobierno no ofreciera ningún argumento cuando preguntó al ministro si había alguna razón para que Felipe González se entrevistara con el abogado Jesús Santaella.

El portavoz de CiU, Joaquim Molins, manifestó que el reconocimiento por el Gobierno de la enorme gravedad de la sustracciónrealizada por Perote "confirma nuestro diagnóstico sobre la necesidad de poner un horizonte temporal a la legislatura, por los enormes, enormes, enormes errores cometidos por el Cesid y por el Gobierno".

Iñaki Anasagasti, en nombre del PNV, aseguró que la información aportada por el Gobierno -con un marcado carácter técnico- revela que éste es un país "chapucero" y que el GAL no existía para el Cesid.

El parlamentario vasco restó validez a la teoría del Gobierno según la cual está siendo víctima e una conspiración. "Ese es un cuento sin mayor rigor, porque de lo contrario el presidente tenía que comparecer aquí y no el ministro del Interior", concluyó.

Luis Mardones, de Coalición Canaria (CC), dijo que su impresión al término de la reunión es "penosa" porque los datos presentados por el Gobierno carecen de relevancia. Igualmente, reprochó al Ejecutivo su falta de capacidad para afrontar la situación creada tras la sustracción del material del Cesid.

Por último, el jefe de los socialistasen el Congreso, Joaquín Almunia, sostuvo que tras la información aportada por Suárez Pertierra, queda claro que "están plenamente justificadas" las entrevistas mantenidas por el Gobierno para intentar recuperar esa información sensible para la seguridad del Estado.