Así lo puso de manifiesto la presidenta de la Aepap, la doctora Concepción Sánchez Pina, en el Congreso Actualización Pediatría que organizó la Aepap y que se celebró este jueves en Madrid con el lema ‘Comprometidos con la formación’, donde se señaló que su atención correspondería a casi 600 plazas "de difícil cobertura”. Estos datos se obtuvieron de una encuesta realizada a los vocales autonómicos y sociedades federadas de Aepap, que aportaron datos sobre sus respectivas comunidades autónomas.

La falta cobertura de esas plazas se debe, según denunció Sánchez Pina, a sus malas condiciones laborales o a que sean rurales, estén abarrotadas o que su fórmula de contratación sea temporal.

Asimismo, denunció que en muchas de estas plazas el pediatra está totalmente solo, al tiempo que, en otras, no cuenta con el apoyo ni siquiera de administrativos.

La asociación puso el acento en la especial incidencia de esta problemática en comunidades de Madrid, con un 20% de plazas, y 16% en Navarra y al menos un 10 en Cataluña o Andalucía; y subrayó la especial dificultad que esto representa en Madrid, Cataluña y Andalucía por ser las comunidades españolas con más población, resaltando que en cada una de ellas más de 100.000 niños se encuentran en esta situación, una cifra que alcanza las 200.000 en Madrid.

Asimismo, la asociación denunció que una de cada diez plazas de pediatras no está cubiertas por médicos de esta especialidad, lo que tiene especial incidencia en comunidades como Baleares o Castilla La Mancha y provincias andaluzas como Huelva.

Destacó que “la asistencia por enfermería es incompleta”, y, al respecto, explicó que, en algunas comunidades autónomas, como Andalucía, los menores no cuentan con enfermería con dedicación exclusiva a la infancia; mientras que, en otras, como la Comunidad Valenciana, Cataluña, Madrid y Navarra, hay enfermeros que tienen que realizar las actividades del Programa de Salud Infantil en soledad, “cuando debería realizarse en equipo entre una enfermera pediátrica y un pediatra de atención primaria”.

En algunos centros navarros, por su parte, ante la falta de médicos y pediatras, la organización aseguró que “la enfermería atiende de forma autónoma consultas de demanda de los ciudadanos”; toda vez que esta especialidad realiza el cribado de las consultas urgentes y preferentes, algo que también ocurre en Cataluña. En esta región, de hecho, se quiere potenciar la gestión enfermera de la demanda “basada en protocolos consensuados”.

En este sentido, la Aepap consideró “importante” implicar a enfermaría en el cribado de los pacientes sin cita “para contribuir a mejorar la asistencia integral de las familias”.

PUNTO DE PARTIDA ERRÓNEO

“En los últimos dos años hemos hecho un gran esfuerzo, hemos colaborado con las autoridades sanitarias para seguir atendiendo a los pacientes, mantener coberturas de vacunación y también dar información rigurosa a las familias, con las que hemos sido puente, pero es necesario tomar medidas ya para evitar el colapso”, resumió la doctora Sánchez Pina, quien señaló durante la presentación que, de acuerdo con los cálculos de la Asociación, que agrupa a más de 5.000 pediatras de AP de toda España, en la actualidad faltan alrededor de 1.300 pediatras en los centros de salud.

A su juicio, “lo más llamativo es que, en el nuevo plan nacional de necesidades de especialistas, llamado ‘Informe Oferta-Necesidad de Especialistas Médicos 2021-2035’, expuesto recientemente por la ministra de Sanidad, se afirme que no faltan pediatras en España, que las necesidades estarán cubiertas por la bajada de natalidad”. Este planteamiento, denunció, “parte de un punto de partida erróneo, pues en el informe se indica que la situación actual no tiene un déficit de pediatras, cuando diversos estudios estiman el déficit de pediatras en centros de salud entre un 25 y un 27%”.

SOLUCIONES ORGANIZATIVAS

Por ello, y para hacer frente a esta situación, los pediatras de atención primaria invitaron a las comunidades autónomas y al Ministerio a “buscar soluciones organizativas para paliar los próximos años ese déficit de pediatras, con recursos e imaginación”.

En este sentido, Aepap aboga por aumentar la formación de los futuros pediatras en Primaria. “La docencia de la pediatría tiene dos partes, una hospitalaria y otra de AP. Los puestos de trabajo en pediatría son el 60% en AP y el 40% en hospital, mientras que la formación es un 94% en hospital y un 6,25% en atención primaria (tres de 48 meses). Hemos solicitado que de forma obligatoria un 12,5% (seis de 48 meses) de la formación se dé en Atención Primaria, y no se admite”, denunció Sánchez Pina.

Por ello, invitó a “reflexionar sobre el futuro de la pediatría, sobre dónde queremos que estén los pediatras, porque los niños irán allí”; e indicaron que “asegurar la presencia de pediatras en los centros de salud es relevante, sobre todo, si se tiene en cuenta que la frecuentación de las urgencias de AP en el Sistema Nacional de Salud es tan elevada en menores de cinco años como en mayores de 80”, según datos del Ministerio de Sanidad. “La salud de la población empieza en la infancia y no es el momento de escatimar recursos”, concluyó la presidenta de Aepap.